sábado, 22 de diciembre de 2018

ARNULFO MAZO: HISTORIAS DE ARRIERÍA


LUIS ARNULFO MAZO MAZO

Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=jJR99prp0fg


Don Arnulfo Mazo nació el 27 de noviembre de 1933. Hijo de Luis Reynaldo Mazo Orrego, de San Andrés de Cuerquia, y de Clementina Mazo Zapata, de San Andrés Briceño pero radicada en Ituango. En ese tiempo Briceño era corregimiento de Yarumal. “Mi padre trabajaba en Ituango y Peque; él era negociante y andariego. Mi papá era arriero y negociante de mulas, de ganado, de marranos, de lo que le vendieran”, dice don Arnulfo. En 1961 Arnulfo Mazo contrajo matrimonio con Maria Marcos David Moreno, relación de la cual nacieron diez hijos.

En su época, al padre de don Arnulfo Mazo le tocó trabajar en San Mateo con don Marcos Valle. De San Mateo pasó a Los Llanos donde se encontró con Clementina Mazo quien había llegado allí para visitar a su hermana Esperanza Mazo quien era maestra en este corregimiento. En este lugar se conocieron Luis Reynaldo y Clementina “y formaron el negocio, el matrimonio”, como lo expresa don Arnulfo. Ya casados Luis y Clementina se establecieron en Peque donde tuvieron cuatro hijos: María, Alfonso, Alicia (fallecida) y Arnulfo.

Sacó don Luis Reynaldo a su hijo Arnulfo de la escuela cursando el grado cuarto para que le ayudase a arriar y para que trabajase la agricultura - Fue Luis Reynaldo dueño de la finca el Granadillo.

Cuando Arnulfo tenía entre 19 y 21 años llegó al pueblo el ejército reclutando hombres para el servicio militar obligatorio. Su padre Luis le sugirió que “se volase”, que se escondiese, que se fuese para la finca La Sequia donde Liano Guerra, y allí se quedó como cinco años. Estando en este lugar pasó por allí un sargento del ejército para Ituango a reclutar jóvenes y de nuevo debió esconderse. “qué tan maula es uno hombre. Donde hubiera pagado servicio hubiera sido otro tipo distinto”, afirma don Arnulfo.


Abandonó la finca de la Sequía y se vino para la Vereda San Pablo a administrarle una finca a don Pacho Guerra. Trabajó un tiempo con don Pacho, liquidó con él y se vino para el pueblo a trabajar manejando como 20 mulas de don Pacho. “Era caporal de la mulada. Yo le movía de aquí a Uramita lo que él compraba de frisol. Lo que producía la finca lo movía yo, y como él tenía el mejor almacén aquí, yo le traía todo lo que traían de Medellín”, recuerda don Arnulfo.

Eran los tiempos en que todo entraba y salía del pueblo por medio de la arriería. Sumaban 38 arrieros y 150 mulas. Unos manejaban veinte mulas, otros cinco, otros diez. El ejército acompañaba la arriería para evitar que los asaltantes robasen la carga de los arrieros durante el recorrido y/o en las posadas también.

Entrada la violencia, en el Corregimiento Los Llanos había 50 policías que había mandado el municipio de Ituango. Eran los tiempos en que el ejército y la policía no se querían. “La policía bajaba a La Asomadera a echar candela pa´bajo, pa´todas partes, y el ejército subía de aquí pa´ arriba y los devolvía, y entonces la gente que trabajaba por aquí cerquita cuando oía ese candeleo allá se derrotaban pal pueblo a favorecesen con el ejército”.


En una de las jornadas a Uramita, y luego de ayudar, por orden del ejército, a cargar a un civil asesinado por la chusma liberal en La Vironda y a un policía muerto en el Llano de Juntas, fueron puestos presos, durante dos días, todos los arrieros que iban ese día de Peque para matarlos. “Este Miro Agudelo que hay por ahí, ese es un verriondo. Y nos dijo: yo les voy a abrir esa puerta pa´ que nos vamos. Jumm, sabe cosas. Entonces dijo mi papá: hombre, no. No haga eso que nos van a largar”. Mientras pasaba la discusión entre arrieros detenidos corrió la alarma de que la chusma liberal se había entrado a la finca La Aguada de Camparusia y había asesinado a Jesús, jefe de la chusma conservadora. Ante la zozobra de que la chusma liberal pasaría a Uramita, un sargento del ejército pidió a la policía dejar libres a los arrieros detenidos para evitar que fuesen muertos por los enfrentamientos.

En los tiempos de la arrería, los arrieros eran los correos, vendían el café, compraban las provisiones de los comerciantes, traían las facturas y el resto de plata de lo vendido. Los comerciantes no salían porque les daba miedo ya que podían ser asaltados o robados por asaltantes de caminos. “Cuando nosotros llegábamos aquí, ya estaban todos ahí  ´onde Melina que era la administración principal de guarapo. Ahí estaban listos con las totumas de guarapo esperándonos pa´que tomáramos”, recuerda con alegría don Arnulfo.

Dice don Arnulfo que en el tiempo de la violencia algunos conservadores de buen corazón empezaron a llevarles sal y cositas a los liberales que estaban escondidos en el monte. Entre ellos están Milio Osorno, Alfredo, Jesús Días, entre otros.  “La sal era un elemento perseguido porque no la había, el gobierno la prohibía. Y el que tenía un negocio de sal o conseguía sal, era un héroe, y donde le compraban era por onzas y la gente andaba con un frasquito de almendras colgadito aquí en la cintura con un poquito de sal. Cuando llegaba y le daban comida, pero no había sal, entonces él llevaba la salecita aquí en el frasquito y le echaba”.

Comenta don Arnulfo que a finales de 1948 un sargento del ejército de apellido Lalinde les dijo que ese sería el último o penúltimo viaje de arriería que harían porque la orden era que Peque sería ocupado por la policía que venía de Ituango y el ejército salía. La policía venía a “barrer por parejo con lo que haiga”. 



En el siguiente viaje se fueron los arrieros hasta El Llano de Juntas y aquí fueron advertidos por unos amigos de apellido Vega de que no continuasen porque los estaba esperando la contrachusma (nombre dado a la chusma conservadora) en San Benito y La Cabaña para quitarle las mulas y la carga e incluso asesinarlos. Los arrieros atendieron la advertencia y se quedaron en El Llano y entregaron la carga a Lisandro Serna, “el tío de Bernardo Guerra, hermano de doña Rosaura. Él era un rico de Juntas, un tipo de confianza, conservador. Era muy formal con la gente de aquí y también le sacaba cosas a la gente de Camparusia. Entonces ahí mismo a descargar todo eso y entregar esa carga a Alfonso Serna. Compramos ropita y sal y entonces nos vinimos pa´ca”.

Huyeron del pueblo para San Mateo entre 20 y 25 familias e hicieron casas de murrapo. De aquí la gente se desplazaba hacia Camparusia. El río de Uramita dividía en dos las zonas de dominio y control del grupo liberal y del grupo conservador. La división alcanzaba hasta Turbo. Por el occidente del río se movía la gente y la chusma liberal; por el oriente se movía la gente conservadora y la contrachusma. La gente de Peque se movía hasta Mutatá para conseguir sal. “Cuando Rojas Pinilla subió al poder, estábamos en Chimiadó, de Dabeiba para Arriba. Estábamos en Llano Grande una vez con un cura que salía a las montañas a confesar la gente y a animar la gente, un sacerdote de apellido Gaviria, estábamos con él cuando dijeron unos viejitos: oiga por allí en aquella cañada que hay una peña donde hay un´agua salada. Entonces dijeron ahí un tipo que había salido del pueblo y era oficial entonces tenemos que ir allá, eso es un salao. Y nos fuimos pa´llá como 20 o 30, y en esos iba Jesús Guerra, Leonardo, los Borjas, gente conocida. Nos fuimos pa´llá y de veras, eso era una peña que esa agua venía salada”. Recuerda don Arnulfo.

Se hizo el entable para extraer la sal de los arroyos de la peña. Se construyó un horno similar al usado para sacar la panela. Se trajeron seis fondos de cobre de la estancia Cañaverales, camino a San José de Urama, la cual había sido quemada. De la finca El Naranjo del filo El Gavilán, de unos Tamayos se trajo el zinc. La tubería se elaboró de guadua. Se llegó a sacar un bulto de sal por día. Llegaban entre 50 y 60 personas diarias a hacer turno para comprar la sal la cual se vendía a 7 pesos la libra.

Con la plata realizada por la venta de sal, se vino don Arnulfo y sus familiares para La Florida, por Los Llanos, a vivir allí. Por Paramillo salían a la finca La Argelia con el fríjol y el café, bajaban y salían a la finca El Chambuscao, finca de los Moras. Siguieron bajando y llegaron a Los Chorros. Mientras don Arnulfo, su hermana, Adán Posso, su hermano José Isaías Salas (hermano natural), su papá y Tulio Valle estaban en Los Chorros, Luis Guerra, doña Maruja y los hermanos estaban en El Llanón, habían hecho una casa en una cañada. Un día don Luis Guerra y familiares celebraban la matada de un marrano y se veía el humero cuando subían 200 policías y contrachusmeros que entraron por El Retiro, por la finca Medellín de los Incapies, a Paramillo.

La gente de Peque se había robado un ganado que era del gobierno, de La Colonia penitenciaria. Este ganado estaba en Culato y El Madero. Venía esta comisión de 200 hombres a rescatar el ganado y pasando cerca de la casa de Luis Guerra agarraron de lejos la casa a plomo. Luis Guerra y familiares se volaron cañada arriba (nota: al final don Arnulfo se refiere a Luis Guerra como Jesús Guerra por lo que en este diálogo no se sabe a qué nombre correspondía). Huyó Arnulfo y familia por el filo de Culatos a Monteloro.

En una ocasión fue vista la policía y los contrachusmeros a las siete de la mañana bajando a la casa de la señora de Rafael Manco sin darse cuenta que allí los estaba esperando un grupito de los chusmeros y les bajaron a un policía. Luego la policía se desplazó hacia La Raíz, subieron por El Palmar y llegaron a la Llorona. Los chusmeros que estaban por los lados de Culatos pasaron por El Alto y salieron a La Llorona y esperaron a la policía y a los contrachusmeros. Allá “quebraron” otro policía. Huyó la policía hacia Los Llanos contando con tan mala suerte que allí había otro grupito en el cual se encontraba Aquilino, Maelo, Pedro Mazo y otra gente y le “cagaron” otro.

Desorientada la policía cogió por el camino del Páramo. Los hechos adversos sucedidos a esta comisión de la policía dio lugar a un disco que recuerda don Arnulfo: “y entró la policía, entró por Paramillo. En mayo entraron fácil y en junio les pesó. Se llevaron cuatro muertos, hay qué suerte les tocó! Bobitos no sean porfiados, no vuelvan a molestar. Fíjense que ya no pueden con la fuerza liberal”. Tan mala suerte tuvo esta comisión que no pudo rescatar ni una vaca sino que se llevaron cuatro de sus muertos.

PARTICIPACIÓN EN CONCURSO DE ARRIERÍA
No en vano la vida le da conocimiento y experiencia a cada persona. La vida curtida de arriero de don Arnulfo, que se inició a la edad de once años al lado de su padre, lo dotó de habilidades y competencias que lo llevaron a participar en el concurso de arrieros y fondas de la Feria de las Flores en la ciudad de Medellín.


Su primera participación en el concurso fue en 1999 la cual ganó amarrando una carga de café en 4minutos y 32 segundos. En el año 2002 participa nuevamente acompañado del alcalde José Luis Úsuga. Dice don Arnulfo, “ya en el 2002, participé con toda la arriería del departamento de Antioquia, y departamentos. Competí con once arrieros campeones. Entonces ya les gané a todos. (…) Yo fui campeón hasta el año 2003. De ahí ya no me admitieron competir, sino jurado hasta el 2011 que fui ahora último que fui a representar al pueblo (…) en el 2010, me parece, una cosa así, ya me tocó jurado supervisor de todo el evento”.

En el concurso de arriería del año 2002 barrió Arnulfo en el concurso gracias a que solo él pudo levantar una carga de doce arrobas sin ayuda lo cual lo hizo acreedor a un reconocimiento de parte de la Presidencia de la República y su imagen fui incluida en el video del himno nacional de la época.


Durante ocho años continuos fue don Arnulfo Mazo jurado calificador en el concurso de arriería y en el año 2011 fue jurado supervisor y condecorado como el mejor arriero de Colombia con 30 puntos de experiencia en lo relacionado con el manejo de mulas.
Y es que sus conocimientos como arriero lo llevaron a ocupar un cargo meritorio dentro del concurso: supervisor de jurados.

VOCABULARIO
En cada campo del conocimiento y/o en cada profesión u ocupación se originan palabras que hacen referencia a los objetos y a las actividades y que deben ser conocidas por el lector no familiarizado con dicha área o actividad.
Don Arnulfo Mazo comparte algunos términos propios de la arriería

Caporal: usualmente se refiere al arriero que sobresale por estar a cargo y por su capacidad para  arriar muchas mulas.

Ayudante: era la persona que ayudaba al arriero; era quien iba por las bestias al potrero, les ponía las enjalmas, las preparaba.

Sangrero: era quien hacía la comida para varios arrieros. Partía horas antes de los arrieros para hacer la comida en la fonda en la cual llegaban estos. Cuando los arrieros llegaban, la comida ya estaba preparada.

Tacador: sostenía (tacaba) el bulto mientras el arriero montaba la carga. Cuando el tacador ya tenía fuerza para alzar el bulto y sabía amarrar, pasaba a ser arriero.

Fueron muchas las trochas y caminos, así como fondas, por las que pasó don Arnulfo con la arriería por varios municipios de Antioquia. “Uramita, Dabeiba, estuve en Mutatá, Frontino, Cañasgordas, Buriticá… no estuve fue en Sabanalarga. Y de aquí pasé a Ituango y San Andrés de Cuerquia (…) El frisol y el café lo llevábamos hasta Atacuí, Atacuí era la bodega, ahí bajaban los carros. Pero en esos días se había dañado la carretera y no pasaban los carros y la agencia de cerveza era en San Andrés y allá subía toda la mulada a traer cerveza y allá subí yo. Los arrieros de Ituango y los de aquí, que era yo, la que yo traía era pa tráela pa´cá. Cerveza desde San Andrés de Cuerquia. Y el camino era por la cordillera y salía uno allí al filo de Campero. Yo trabajaba era las mulas de Liano Guerra y de ahí bajaba aquí. Y yo era el que manejaba la cantina aquí  ´onde está la parvería. Ahí era la cantina de Liano y yo la manejaba”

Nota final: durante la charla no se hizo mención a una labor que viene desarrollando don Arnulfo desde hace muchos años atrás: la manufactura de enjalmas. Es la única persona en el pueblo que elabora este tipo de elemento para la arriería. Es preocupante que en el momento ninguna persona en el pueblo se interese por aprender este arte de manos del mejor maestro de la arriería.





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